La Odisea de Arrendar un Departamento en los Barrios de Moda de Santia

La Odisea de Arrendar un Departamento en los Barrios de Moda de Santiago

En las zonas favoritas de los profesionales jóvenes, los inmuebles son escasos y sus precios hasta se han duplicado.

El centro está de moda: Los profesionales jóvenes prefieren caminar o pedalear en vez de estar 2 horas arriba de un auto.

Verónica Ruiz va con frecuencia al aeropuerto Arturo Merino Benítez. Viaja todas las semanas a Antofagasta, donde se desempeña en una minera. Vivió en esa ciudad hasta este año, cuando se vino a vivir a Santiago junto a su marido, quien trabaja en Providencia. Su plan era arrendar un departamento en esta comuna. Buscaron un par de semanas, pero la oferta era escasa. “Eran pocos y caros”, dice.

Se instalaron en uno ubicado en Manuel Montt. “Era chico, de 40 m2, amoblado y por el que pagábamos $ 600.000 mensuales. Nos cobraban por la ubicación”, cuenta Verónica.

En la empresa tasadora Valuaciones indican que, en los últimos dos años, el precio de los arriendos de departamentos en la comuna de Santiago subió 20% y en Las Condes y Vitacura, 25%. En Providencia, en tanto, se elevaron en 40%, según Portal Inmobiliario. En algunas zonas, incluso, los valores se duplicaron.

Camila González, socia de House Hunting Chile, asegura que hace un par de años era posible arrendar un departamento en torno a la Av. Providencia, como el que habitó Verónica, por $ 250.000 al mes. “Hoy no bajan de los $ 500.000”, precisa.

No es fácil encontrar departamentos. En un portal de internet se oferta un piso de 38 m2, amoblado, en Lastarria, por $ 600.000 mensuales. En la misma web, un loft de 100 m2 del barrio Yungay se arrienda en $ 700.000. Y en Espoz con Nueva Costanera (Vitacura), un departamento de 370 m2 supera los $ 3.800.000 por mes.

El productor de TV Diego Subercaseaux buscó uno de un dormitorio durante todo el primer semestre de este año. Recorrió el barrio Italia, Lastarria y Providencia, pero no encontró nada y se cansó. En agosto retomó la búsqueda, la que aún continúa. “Están demasiado caros”, dice desanimado.

¿Burbuja inmobiliaria?

Verónica y su marido se instalaron de forma temporal en el departamento de Manuel Montt. Mientras, buscaban su espacio ideal. Después de visitar varios, lo encontraron: está en un edificio de los años 40, frente al Parque Forestal. Acaba de ser remodelado, con piso de parquet vitrificado y ventanas termopanel. Por sus 110 m2 pagan $ 600.000 al mes.

“Apenas lo vimos, lo arrendamos”, asegura Ruiz. El aviso de ese lugar se había publicado el mismo día. Estuvo apenas unas horas en un portal de internet y en ese lapso ofertaron por él otras seis personas.

Es una situación normal hoy en Santiago: un departamento ubicado en un barrio “de moda” se pone en arriendo, lo visitan decenas de capitalinos y, una semana después, ya está habitado. Pasa sobre todo en aquellos de dos y tres dormitorios, orientados a parejas de profesionales jóvenes. “Esos están agotadísimos, casi no hay stock”, dice el presidente del Instituto Inmobiliario, Roger Debarbieri.

Es lo que sucede en los sectores que, según los corredores de propiedades, son los favoritos de este segmento: barrios de Providencia como Pocuro, Eliodoro Yáñez y el “Vaticano Chico”; El Golf y Escuela Militar (Las Condes); las calles cercanas al Parque Bicentenario, en Vitacura, como Narciso Goycolea y Espoz; y Lastarria y el Parque Forestal, en el centro.

Cuando hay un departamento disponible en esas zonas, se lo pelean. Francisco Vicuña remodela algunos antiguos ubicados en barrios como Lastarria. Cada vez que pone uno en arriendo, recibe más de 20 ofertas. “Incluso, una chica me propuso pagar un año adelantado por un departamento”, cuenta Vicuña.

Luis de la Flor, corredor de propiedades hace 36 años, dice que antes disponía de cerca de 20 departamentos para arrendar en Providencia y Ñuñoa, principalmente. “Hoy no tengo ninguno. En el Vaticano Chico, donde está mi oficina, hay que esperar meses para que se desocupe uno”, afirma.

Algunos expertos hablan de una burbuja inmobiliaria. En un informe de junio, el Banco Central señaló que “en los últimos dos años se ha generado una dinámica de alzas de precios en ciertas comunas que no se había observado con anterioridad”. Según Luis de Flor, “son precios exagerados”.

Otros, descartan que se trate de una burbuja. Roger Debarbieri afirma que estos precios se deben a una mayor demanda. “Las mejores condiciones de la economía han llevado a que cada vez más santiaguinos quieran vivir en zonas céntricas y mejores”.

Según el arquitecto Sebastián Gray, en el último tiempo se ha tomado conciencia de lo difícil que es moverse por la ciudad. “Por eso los más jóvenes eligen vivir en estos barrios, porque prefieren caminar o pedalear en vez de estar dos horas arriba de un auto”, finaliza.

Fuente:

latercera.cl

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