Constructoras se Preparan Para Menor Dinamismo del Sector con Mayor Diversificación

Buscar sectores más boyantes, como minería, o tener flujos fijos -como concesiones- son parte de las apuestas. También salir al

Publicado: 8 Jul 2013

Buscar sectores más boyantes, como minería, o tener flujos fijos -como concesiones- son parte de las apuestas. También salir al extranjero.

Las lecciones de la crisis financiera de 2008 y sus coletazos en la industria inmobiliaria local fueron al parecer bien internalizadas por el sector. Ahora, con una ralentización de la economía cada vez más evidente, con el Imacec creciendo un 3,5% en mayo como se reveló el viernes, las constructoras e inmobiliarias dicen estar mucho mejor preparadas para aguantar lo que viene.

LAS SEÑALES ESTAN AHI
El INE ya dio cuenta de una caída de 12,1% en los permisos de edificación aprobados en mayo, mientras que las expectativas de corto plazo de los asociados a la Cámara Chilena de la Construcción cayeron desde 70 hasta 60 puntos y las de mediano plazo desde 67 hasta 55 unidades. En todo caso, en la industria son cautos y creen que esta disminución del dinamismo sólo responde a una corrección, más que a una crisis, debido a que el sector que creció muy fuertemente tras la debacle global que siguió a la caída de Lehman Brothers.

Por lo mismo el sector ha venido tomando ciertas medidas para enfrentar los ciclos inherentes de la industria. La clave, aseguran, es diversificar, tanto geográficamente como por líneas de negocio.

LAS CONSTRUCTORAS
Ejecutivos del rubro reconocen que la construcción es la que podría verse más afectada. De hecho, ya se está viendo una caída en los llamados de obras, aseguran.

ICSA:
La filial de Salfacorp debería tener márgenes mejores gracias a la apuesta que han hecho desde 2011 en ingresar a otros nichos, lo que las llevó a comprar compañías que aporten en estos sectores, como Tecsa. Según informó a la SVS en la entrega de sus resultados, hoy los servicios a la minería representan un 24%, mientras que otros han ido reduciendo su peso, como la construcción, pasando desde un 29% al 17%. La filial internacional, en tanto, ya llega a un 11%, desde el 7% que era en el primer trimestre de 2011.

A junio, las cifras mostrarían un crecimiento en el backlog de obras por ejecutar, respecto de marzo, en torno a 8% y 10%.

INGEVEC:
Es otro de los que ha apostado fuerte por diversificar. Según Rodrigo González, gerente general de la compañía, la “empresa participa en diversas obras tanto en el sector público y privado como en áreas como vivienda, industria, retail, turismo, salud, educación (colegios, universidades) y cultura (teatros, centros culturales)”, dijo, añadiendo que “tenemos una cartera muy atomizada de más de 40 obras de construcción en ejecución simultánea, con presencia en diversos sectores”.

A esto se suma, el esfuerzo por estar el sector público, uno que permite capear los ciclos a la baja. “Éste es un sector cuya inversión históricamente aumenta en períodos de menor actividad, por lo cual la compañía espera profundizar su participación”, dijo González.

BESALCO:
Es una de las firmas que ha mostrado el camino en este proceso de diversificación. La firma reconoce que hoy un 59% de su Ebitda proviene del negocio de maquinarias y un 29% de obras civiles, con sólo un 6% en lo internacional.

Una de sus apuestas de los últimos años ha sido por el sector energético, con un alto potencial de crecimiento, considerando que los costos de la energía se prevén sigan altos al menos hasta 2018. Al 2019, la compañía tiene una inversión proyectada en el sector de US$ 610 millones, con ventas previstas por US$ 130 millones a esa misma fecha.

Caso aparte son sus fichas en el sector de concesiones, donde espera invertir unos US$ 580 millones.

Según el gerente general de Besalco, Paulo Bezanilla, “nos sentimos bien preparados y en un muy buen pie para enfrentar eventuales turbulencias futuras (…). Contamos con una alta diversificación de proyectos y mercados, con muchos y muy importantes contratos de largo plazo y un alto backlog que respaldan nuestra confianza”.

ECHEVERRIA IZQUIERDO:
“Hoy estamos tranquilos, puesto que más allá de las señales mixtas que puedan darse hoy o más adelante en el país, nos hemos anticipado para estar bien preparados”, cuenta Cristián Saitua, gerente general corporativo de la firma. Este plan tiene tres líneas de acción: fortalecerse en segmentos especializados de la construcción, como los postensados o las fundaciones especiales. Luego, ampliarse a la minería, gracias a lo aprendido en la construcción de proyectos complejos para industrias como la forestal y la generación eléctrica.

Finalmente, la expansión internacional, como Brasil, Perú y Colombia, les ayudarán a sortear mejor los ciclos. “Nuestro objetivo es que Latinoamérica llegue a representar un 20% de los ingresos totales de la compañía”, dice Saitua.

Sumado a eso, dice el ejecutivo, “estamos explorando nuevas áreas de negocio como obras públicas y obras subterráneas”, siendo el primer pie la construcción de las obras civiles de dos tramos de la Línea 6 de Metro, por US$ 195 millones.

MOLLER Y PEREZ-COTAPOS:
La última firma en abrirse a la Bolsa, dice que cuenta con cuatro áreas de negocio: inmobiliario, viviendas económicas, construcción de obras civiles a terceros (donde se ubica la construcción de hospitales y clínicas, con 37% del mercado) y construcciones industriales. “Esto permite sortear en forma adecuada los ciclos de menor actividad”, dice Ramón Yávar, presidente del directorio de la compañía.

Además, el backlog de proyectos por ejecutar “hemos podido mantenerlo más o menos en los mismos rangos que teníamos el año pasado. En nuestra área de ingeniería hemos ganado algunas propuestas que vienen a reemplazar en parte las obras que estamos terminando”, dice Yávar.

LAS INMOBILIARIAS
En lo inmobiliario, la industria ve que el sector podría sufrir menos, porque la demanda por viviendas no para, además, los niveles de stock son bajos y se prevé que los precios puedan seguir subiendo.

En todo caso, las firmas también están buscando diversificarse con tal de no sufrir grandes impactos. Paz Corp cuenta que “a fines del año 2012 nos planteamos un volumen de negocios y un plan de crecimiento con prudencia que permita generar un flujo de caja más estable a lo largo del tiempo”, admite Ariel Magendzo, gerente general de la inmobiliaria.

El ejecutivo cuenta que “hemos potenciado la internacionalización (…) generando una diversificación en nuestros ingresos. Paz está presente en el negocio inmobiliario de tres países: Chile y Perú, en donde pretendemos realizar un promedio de ocho a diez proyectos durante los próximos dos años; y Sao Paulo, en donde prevemos desarrollar tres a cuatro proyectos anuales”, añade. Al primer trimestre, Chile representó un 67% de sus escrituraciones, aunque ya para todo 2013 se proyecta que Brasil sea un 4,53% y Perú 34,87%.

En Moller, Yávar señala que para esta área, “tenemos la mayor cantidad de obras inmobiliarias en la Región Metropolitanas”. Al primer trimestre, este brazo de la firma representó un 41% de los ingresos, contra el 43% de construcción y 16% de industrial.

Ingevec también apuesta por la diversificación geográfica. Así, dice González, su “inversión inmobiliaria está diversificada: el 35% de sus proyectos se ubica en el norte del país, el 30% en la zona sur y el 35% en el centro del país”. A esto se suma la amplitud en valores de vivienda, señala, con mayor participación en proyectos con subsidio menores a mil UF. Esto, pues “el Estado está invirtiendo fuertemente en viviendas sociales, lo que históricamente se ha profundizado en períodos de menor actividad”, explica.

En tanto, en Socovesa existe confianza de la compañía en que el sector no se verá grandemente afectado, dice Cristian Hartwig, presidente de la firma (

Su apuesta también pasa por los distintos tramos de valores de vivienda. De hecho, según la compañía, durante el primer llamado para entregar subsidios, la firma subió en 27% los montos que se adjudicó, sumando 410 mil UF, que llega a un 85% de lo postulado.

Otra forma de diversificación es que Socovesa sigue apostando por las oficinas, con tres proyectos hoy en desarrollo. Aconcagua, de Salfacorp, está dando los primeros pasos en Miami, un mercado que por sí mismo es cinco veces el chileno, acusando su gran potencial.

Fuente: diariofinanciero.cl