¿Conviene Operar con más de un Corredor?

El apuro por vender o arrendar, la desconfianza o la presión de los corredores hacen que muchas veces las personas

Publicado: 9 Jul 2013

El apuro por vender o arrendar, la desconfianza o la presión de los corredores hacen que muchas veces las personas encarguen su propiedad a más de un profesional. Pero ello no asegura mejores resultados, dicen los expertos.

La presión de los corredores por captar propiedades siempre ha existido, afirma Adolfo Ovalle, presidente de Acop Cámara Nacional de Servicios Inmobiliarios.

Es que para estos profesionales es prioritario contar con una cartera de bienes raíces para desarrollar su labor, explica el dirigente gremial.

Claro que hay factores que han incidido en una mayor competencia por captar bienes raíces en los últimos años.

Por un lado, señala Adolfo Ovalle, ha aumentado el número de corredores que operan en el país y existe una mayor presencia de oficinas de corretaje en las distintas comunas del país. Y también, indica, hay intermediarios informales, que muchas veces dañan el prestigio de la actividad.

A su vez, hay factores de mercado que explicarían en algunos sectores esta mayor competencia.

Por ejemplo, afirma Ariel Arancibia Elías, presidente Nacional de Coproch, en muchas zonas la demanda por arriendos es mayor que la oferta.

De esta manera, hoy quien desee colocar una propiedad en el mercado tendrá un gran abanico de corredores donde escoger. Más si el bien raíz se encuentra en una zona que presenta poca oferta y mucha demanda, lo cual lo transforma en un producto apetecido.

EVALUAR BIEN
Pero ¿conviene encargar una propiedad a más de un corredor?

Afirma Adolfo Ovalle que las personas creen equivocadamente que el hecho de que varios profesionales tengan la propiedad en su cartera hará que esta se venda o arriende más rápido.

No siempre es así, dice el presidente de Acop, pues los corredores priorizan aquellas propiedades que tienen en exclusividad. «Es en ellas donde ponen sus mayores esfuerzos comerciales».

Agrega que trabajar con más de un corredor es una tendencia que existe hoy en el mercado. «Pero no es la mejor opción para el propietario».

Lo corrobora Ariel Arancibia, quien señala que desde «el punto de vista del dueño o arrendador de una propiedad resulta por lo general atractivo, pues tienden a pensar que mientras más corredores estén promocionando en paralelo sus propiedades, mayores serán las perspectivas de éxito, lo que no es necesariamente así».

Comenta el presidente de Coproch que una de las razones por las cuales las personas toman esta alternativa es debido a que existe desconfianza de contratar un solo corredor de propiedades, por temor a ser víctima de malas prácticas.

Para resolver este punto, señala, la clave está en elegir bien con quién se trabaja. Si es uno solo, mucho mejor.

«Al elegir la exclusividad, el cliente solo se entenderá con un solo agente y no tendrá un eventual desfile de personas tratando de vender o arrendar su propiedad, lo cual además se presta para abusos y facilita que corredores de propiedades inescrupulosos suban artificialmente los valores de transacción».

¿COMO ELEGIR A UN CORREDOR IDONEO?
Ariel Arancibia indica que, antes de encargar una propiedad a un corredor, lo primero es verificar si este tiene iniciación de actividades ante el SII y patente municipal. «Con lo anterior, corroboramos que está establecido y evitamos que el cliente comprador, vendedor, arrendador y el arrendatario recurran a un corredor fantasma».

Adicionalmente, señalan los dirigentes gremiales, es fundamental cerciorarse de si el corredor cuenta con la experiencia y capacitación necesaria.

«En nuestro caso, por ejemplo, contamos con el sello Corredor Certificado Acop», comenta Adolfo Ovalle, lo cual permite a los clientes cerciorarse de la idoneidad del corredor que contrata.

Adolfo Ovalle afirma que otra de las recomendaciones es que ojalá el corredor de propiedades pertenezca a alguna asociación gremial.

Y también aconseja, antes de elegir a un corredor, visitar a más de un profesional, para quedarse con aquel que le genere más confianza.

TERMINOS CLAROS
Para que las cosas queden claras entre el cliente y el corredor, una de las alternativas es firmar un contrato de exclusividad, en el cual se expresen las obligaciones de ambas parte.

En él, se pueden fijar plazos, para así evitar que el acuerdo sea una «camisa de fuerza» para las partes.

Fuente: elmercurio.cl